la matita de maíz, frijol...

si ser niña significa querer alcanzar estelas en los lugares más extraños, les diré que no ,
porque yo recuerdo cuando fui niña, aunque han pasado tantos años es algo que no se olvida, cuando lo fui y metía granos de frijol en mis fosas nasales, no sé si para torturarme, para convertirme en cuento o solo era para llamar la atención, mi madre salía corriendo conmigo a la casa de su amiga, de la cual no recuerdo el nombre, no sé si porque me torturaba o porque me obligaba a echar fuera esos granos de frijol que yo tenia atorados en la nariz,
la verdad es que pensaba que podía ser matita de frijol, me soñaba con ramas creciéndome entre los ojos, saliendo por las orejas y la boca, en esos sueños veía como cientos de ramitas crecían por encima de mi cabeza y era algo así como enramada, era una extraña manera de relacionar la tan común historia de La Medusa, que les había dado a los adultos por narrarnos antes de dormir .
Me ponía los pelos de punta esta historia, y creo que en el inconsciente, mi yo interno trataba de aligerar ese susto que a diario vivía yo antes de dormir..Don pepe nos sentaba a su alrededor y a la luz tenue del quinqué, volvía a leer la triste y lúgubre mitología y las luces tenues parecían ir pintando en los muros pardos las miles de serpientes que se movían, proyectándose, yo las miraba de reojo, temor acaso , de verlas de frente y convertirme en piedra. Pensaba que si me hacia estatua, me pondrían en algún cementerio señalando alguna tumba.
Y que tal si esa tumba era la de la mujer de blanco y me tocaba verla emerger del fondo de su fosa, tan efímera , tan ligera , tan poco perceptible..viajando sin tocar el piso y que tal si al fantasma le daba por acariciar a esa estatua, que en este caso sería yo.
Y todo por mirar esas sombras proyectadas en el muro. Así que entre quererme hacer la valiente y permanecer muda, estática como oyendo, porque la verdad después de la primera vez no volví a oir la historia, ponía los ojos fijos en don pepe pero mi mente vagaba entre esas sombras proyectadas y la sofisticada imaginación que a los cinco años puede tener una niña.
Así pasaba la hora de la lectura, ahora sé que don pepe nos leía esa historia porque la conocía de memoria y siempre encontraba que cosas adaptarle, y quién lo sabría ..nosotros no sabíamos leer y Don Pepe tampoco..
Así que don pepe. después de que le cayó aquel rayo en una tormenta eléctrica y llegó al rancho, oliendo a azufre y tuvieron que llevaron de emergencia en una carreta con el doctor del pueblo, él cual no cabía en su asombro de verlo con vida, después de que el rayo le había perforado el cuerpo, Don pepe solo perdió algunos dientes y se encogió un poco...pero las heridas de los pies, esos huecos que le abrieron la descarga eléctrica fueron sanando con el tiempo y con una buena porción de arnica.
Fue ahí acostado donde mi bisabuela Tencha le leyó la historia de La Medusa y le encantó tanto que la hizo propia..y cada noche después de recuperado nos contaba sus adaptaciones..En el pueblo se le quedó el mote "del ahumado"
porque según cuentan, llegó montado en su yegua con los pelos , la ropa , la piel ahumada y le salía humo del cuerpo , parecía una estepa apagada..
¡Ah que don pepe ! El sin saber que el era el causante de todas mis pesadillas soñándome matita de frijol
He ahi que todos los dias mi madre levantaba mi cabeza y revisaba mi nariz mirando muy adentro por si acaso.`porque cuando menos lo pensaba, yo ya tenía dentro los granos de frijol, o de maiz, o lo que fuera.
Gran mortificación vivía mi madre vigilándome.
Yo no podía entender porque mi madre no me dejaba convertir en matita de frijol, si era mi tan anhelado sueño, matita era mejor que piedra.
pero un día ,mi sueño se hizo realidad ,
estabamos cenando frijoles graneados con deliciosas tortillas de harina y un espeso chocolate caliente, cuando de pronto, los frijoles tomaron otro camino en mi traquea, sentía asfixarme, mis ojos se llenaron de agua, me faltó la respiración , me puse azul y después negra, mis padres corrieron a socorrerme me pusieron boca abajo volando en el aire y me dieron sendos golpanazos en la espalda. Apunto estuve de morir ahogada por mi propio bocado. Pero me recuperé y continue cenando.
Por la mañana, estando en el desayuno, yo sentia que algo me molestaba en la nariz , asi que eche el aire con fuerza y nada, la molestia seguía ahi, volvi a exhalar con fuerza y nada pasó, entonces tan pequeña que era se me ocurrió tapar una de las fosas nasales y volver a exhalar, cual no seria mi sorpresa al ver salir volando desde dentro de mi nariz granos de frijoles, ¡diez granos de frijoles!
¡y todos habían salido de mi nariz!
MI sueño se había hecho realidad había dado a luz granos de frijoles y todo fue por una ligera y breve exhalación de mis pulmones .
Desde entonces dejé de soñarme matita de frijol y temerle a la medusa fue algo que también pude superar pero hasta hace poco , eso que ni qué.* *
RECUERDOS
ROCIO AVITIA GARCIA
ABRIL 7 DE